viernes, 24 de octubre de 2008

Una reflexión para el camino

Alguien me dijo que cuando trata uno de abarcar muchas cosas, invariablemente alguna de las cosas no sale como uno planeaba.

Pero ya mas noche cuando estaba en mi casa, me di cuenta de que esto ha sido repetitivo en mi vida. Tengo un pequeño síndrome de tratar de quedar bien con todos, y eso no funciona así. Tenemos que marcar prioridades, y eso es lo que mas me cuesta hacer.

Siempre he pensado que soy capaz de hacer todo lo que me propongo, y ¡oh sorpresa! van a suceder cosas en tu camino que harán que te desvíes y llegues a otros pueblos. Como dirían en el IAP, las externalidades siempre estarán presentes. Pero eso no es lo preocupante.

La verdad es que si me afecta, cuando no llego de la forma que yo quería, me deprimo, me encierro dentro de mí, y me culpo por no saber equilibrar, o por dejarme llevar por la emoción.

Darle a cada cosa su lugar, su importancia, y su valor. Es muy simple decirlo, llevarlo a cabo es lo que me cuesta.

Quiero hacer tantas cosas... Primero tengo que ponerme en mi lugar...
Paso a paso, yo quiero correr, y me estoy tropezando.

Calma, tómalo con calma.

1 comentario:

Rubén Alejandro Vera Vázquez dijo...

Hola mariana, tu pagina me agrado mucho tienen un toque muy humano, y es cierto aveces queremos correr y aunque lo mejor sean pasitos, recuerda que en este mundo frio siempre hay personas que te acompañan.

En la vida hay tiempo para todo, priorisar es muy bueno pero hay que ser precavido para priorizar las cosas que realmente valen la pena, en ocasiones cometemos el error de darle importancia a cosas que no la tienen.

Cuida mucho de no deprimirte, recuerda que tu vales mucho.

Si quieres escribir tus aventuras haslo, en lo personal se me hacen muy interesantes y sobre todo, me ayudan a comprender un poco mas a las personas y a mi mismo, siempre es bueno vivir por las palabras de otras personas, sobre todo aquellas cosas que aunque uno quisiera conocer simplemente no le toco vivir.